Un ejemplo archiconocido por todos es el cuadro de La Gioconda, más conocida como la ‘Mona Lisa’, que Leonardo da Vinci pintó en el siglo 16 durante el renacimiento italiano. Es probablemente el cuadro más famoso del mundo y probablemente uno de los más reproducidos, estudiados e incluso parodiados. El original se conserva en el museo del Louvre de París y no es más que el retrato de Lisa Gherardini, esposa de Francesco del Giocondo.
Debido a su popularidad muchas tendencias artísticas la han utilizado, como pueden ser la dadaísta o la surrealista, parodiándola o modificándola. En 1919 una gran influencia del dadaísmo, Marcel Duchamp, hizo una parodia del retrato modificando una copia barata del mismo con un bigote y una perilla y escribiendo las letras L.H.O.O.Q., que leídas en francés vienen a decir algo parecido a "Elle a chaud au cul”. Traducido al castellano significa ‘ella tiene un culo caliente’, que quiere decir que está excitada y disponible o ‘cachonda’ en lenguaje más coloquial. El objetivo de esta burla no era más que jugar con el rumor de la homosexualidad de Leonardo.
También ‘jugaron’ con el cuadro artistas de la talla de nuestro Salvador Dalí, que pintó su Autorretrato como Mona Lisa en 1954.
Más adelante movimientos como el Pop Art también usaron la obra. En 1963 su más famoso exponente, Andy Warhol, hizo varias serigrafías a color del cuadro, convirtiéndola así en un nuevo símbolo moderno, similar al de Marilyn Monroe o Elvis Presley. Al mismo tiempo y mediante la técnica de dibujo y los colores crudos criticaba una sociedad obsesionada con la producción en masa y el consumismo feroz.
Una reproducción de la Mona Lisa fue encontrada en una ladera de un monte en Newport, Oregón, el 15 de Agosto de 2006. Fue creada por el artista Samuel Clemens usando acuarelas.
Pero no solo se convirtió en un símbolo a nivel gráfico, ya que muchos artistas de otros géneros la utilizaron o hicieron referencia al cuadro, como pueden ser Nat King Cole con su canción ‘Mona Lisa’ del año 1950 o la película ‘La sonrisa de Mona Lisa’, dirigida por Mike Newell en 2003 y que cuenta en su reparto con actrices de la talla de Julia Roberts o Kirnsten Dunst.
Albert Einstein es probablemente uno de los personajes más famosos de todos los tiempos. Está considerado como un genio por su brillante Teoría de la Relatividad que desafiaba las leyes de Newton, la base de todo conocimiento físico hasta el principio del siglo XX. Pero como persona Einstein era un tanto peculiar y excéntrico y la famosa foto suya sacándole la lengua al fotógrafo es su imagen más conocida.
Dicha foto fue tomada el 72 cumpleaños de Albert, el 14 de Marzo de 1951, por el fotógrafo de prensa Arthur Sasse en el campus de la Universidad de Princeton.
Albert volvía de un acto que había tenido lugar en su homenaje con su mujer y otro profesor. Aunque estaban sentados dentro del coche los reporteros y fotógrafos seguían insistiéndole para que mirara a cámara, ansiosos todos ellos de conseguir una buena instantánea. Sometido a esta presión Einstein gritó en varias ocasiones “¡Ya es suficiente!” sirviéndole de poco ya que los reporteros siguieron acosándolo con sus maquinas retratadoras. Y fue el momento en el que un fotógrafo le pidió un posado para una fotografía en recuerdo de su cumpleaños cuando ya no pudo más y decidió sacarles la lengua a sus hostigadores. Sasse apretó el botón en ese instante y, sin ser consciente de ello, su fotografía iba a ser portada de infinidad de revistas, publicaciones, productos, camisetas, etc.
Cabe mencionar que a Einstein le gustó mucho la foto. La recortó de manera que solo saliera él. Entonces encargó varias copias de la foto ‘manipulada’ y la convirtió en una tarjeta de felicitación que enviaría más tarde a varios amigos suyos. Esta es la forma que todos conocemos, la que el propio Einstein pidió recortar para aparecer en solitario y en primer plano.
1 comentario:
Es interesante flor, no conocía la historia de la foto de Einstein. Continúa escribiendo!
Bsitos, Marta
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